29.11.09

Desbestiaficando

Conforme uno va a la escuela primaria, se aprende una serie de datos y frases célebres para no pasar como un completo imbécil cuando por fin se le presenten a los padres del obscuro objeto del deseo (aka novi@). De esta forma nos enseñan a contar sin usar los dedos (matemáticas), algunas fechas de eventos mortales, brutales y violentos (historia), a no decir ansina o haiga (español) y a memorizar el comienzo de algunas obras literarias famosas y diálogos que suenen cultos (literatura).

Pero uno crece. Y un día, en medio de una tormenta tropical, inesperada e iracunda, uno termina por refugiarse en una biblioteca y ojear finalmente aquellos volúmenes que nos hicieron memorizar y ¡oh sorpresa! No eran lo que Mrs. Canseco decía, si no que su tema era completamente otro y en verdad hemos pasado por bestias durante este tiempo.

Para desbestiaficar, la edigator se complace en presentar… los inicios de obras literarias más importantes en su contexto apropiado (establecidos por la mismísima edigator).

Primero, dos diálogos hipermentados en su contexto apropiado (si quieren saber el autor y la obra, den click sobre la cita).

To be or not to be.


Cuatro inicios famosos:

I.

¿Encontraría a La Maga?

II.

En un lugar de la mancha de cuyo no nombre no puedo acordarme

III.

Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo.

IV.

Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo .


Listo, ahora sí pueden presentarse ante la alta sociedad.

18.11.09

Epitafios, para enterrarlos

Epitafios es una serie argentina coproducida con HBO.

Argentina, como todos saben, no es la perita en dulce que los argentinos creen, porque para empezar, está llena de argentinos. Para seguirle, tuvieron una serie de represiones políticas que terminó en miles de desaparecidos, bebés vendidos y policías golpeando mamás y abuelas en las plazas . Detenían a un sospechoso criminal (osea, era o comunista o artista u homosexual o bien vestido o mal vestido o pelo largo o hippie o vaya, quien sea que no fuera un hombre "decente", etc), y agarraban a toda su familia, amigos, vecinos, novios, compañeros de clase, profesores, directores de la escuela, perro, gato y el señor de la tiendita que le vendía los cigarros. Luego de secuestrarlos, los torturaban a todos física y emocionalmente y, por último, a algunos los arrojaban (vivos) al mar.


Uno pensaría que con este sórdido pasado nacional, la serie que se enfoca en un serial killer quien, tortura, desaparece, mutila o mata a todos los que cree responsables del fallecimiento del amor de su vida (osea amigos, amigas, profesores, vecinos, etc), sería una crítica o una alusión a la realidad nacional. Porque es obvio que el serial killer representa (con sus acciones) a estos policías o al gobierno. Pero los policías quienes quizás deberían demostrar que ya no son los asesinos despiadados de antes se la pasan hundidos en ineptitud y sentimientos de venganza, con la pistola desenfundada, disparando sin ton ni son (osea, sin juicios, abogados, leyes o cualquier otra cosa que podría proteger al ciudadano) a todos los que parezcan un poquito asesinos o culpables.


Finalmente, ¿quién es el serial killer? ¿Quién es ese que la policía debe aniquilar pues jamás jamás será bueno, ni tiene remordimientos, ni nada nada? ¿Quién es el que debe ser masacrado como perro, por andar desapareciendo, torturando, secuestrando y golpeando abuelitas en las plazas (casi todas las mujeres que mata se parecen a estas señoras)? Entonces, ¿quién es éste que merece morir (¡Sin juicios o apelación a la ley!)?
Ah, por supuesto. El único en toda la serie que es "indecente", osea el malo es el gay que además, es artista. ¡Horror!



Son 13 episodios de la primera temporada, 13 horas.


Úsenlas mejor para aprender guitarra.

16.11.09

el retorno de la infame graña

antes de abrir los ojos
. . . . . . . . . . me despierta la abominada
.
. . . . . . . . . . . perversa
.
. . . . . . . . execrable
.
. . . . . . . . . . graña
con aborrecibles adjetivos

arriba, desgarra la luz en migajitas y la deja botada por ahí

mi pinche y reputísima graña


7.11.09

Nuevos protocolos de urbanidad I

Ante la presencia de las actividades virtuales, la destreza y las habilidades manuales son cada vez apreciadas más hoy en día. El reafirmar el valor individual que aporta una persona frente al monopolio computarizado reentabla amistades y lazos afectivos. Así, estos talentos no sólo son adecuados para la autosatisfacción sino también para poder entablar exitosas relaciones interpersonales.
No existe nada más adecuado en, digamos, una cena entre amigos o de negocios, que tomar una servilleta y voilà, realizar un bello y original origami que dejará a todos boquiabiertos y encandilados con tan alta facultad de manipulación dactilar.

Para empezar, uno sencillito:

1.11.09

Especial de Jalogüín, 2009

Llegó y se fue Jalogüín acá en el gabacho. En Madison, WI, llega gente de todos los rincones de gringolandia para celebrar este día santo.
¿Oh, sabia e ilustre edigator, qué se celebra en Jalogüín?, me pueden preguntar.

Y yo respondería: Si uno lo dedujera por la serie de elementos decorativos y repetidos cada año en tradiciones y vestidos, podríamos decir que es una fiesta para venerar a la santa realidad alterna. Se celebra lo muerto, la sátira, el estereotipo que da miedo, el juego.


¡Viva todo aquello tenebroso e inexplicable! ¡Viva el miedo! ¡Vivan las cosas terribles! ¡Vivan!

De otra forma no veo cómo uno puede juntar arañas patonas, murciélagos, muertos vivientes y máscaras de George W. Bush… oh, wait.


¿Entonces se celebra el miedo?
¿Se celebra lo imposible? Se juega a ser otro reducido al estereotipo más elemental, por ejemplo uno es gato al pintarse rayas en la cara y colgarse en las nalgas una tira de tela rellena.


No sé bien, pero sí me llamó la atención lo que en los ojos de varios puede ser precisamente esa clave que conforma la identidad del otro.



Vi varios disfraces de mexicanos, no se parecían a Fox, ni a Calderón, ni al Peje, ni a Juanito, ni a las mujeres migrantes que se murieron en la frontera este año o los campesinos brincándose el muro, o a las sirvientas, conserjes, pizcadores, lecheros, jardineros, etc´s. Además, yo había entendido que ser mexicano era algo malo, equiparable a robar un banco o cualquier otra cosa ilegal. Pero no, en Jalogüín ser mexicano (miedo) se reduce (más miedo) a colores brillantes en (estoy temblando) un sarape, un gran bigote del villano reventón y un sombrero (Arghhh!).

Aquí, un breve ejemplo con los diferentes tipos de mexicanos según los ojos de los estadosunidos.



El que sabía que por ahí iba la cosa, pero al menos trae sombrero, bigote y sarape.
2 mexicans vistos por atrás

Mexican busted!
Mexican burro, i mean, ass.
The breeders.
Mexican stealing bike.
Mexican bigote, orale!
Tres alegres compadres y una canadiense.

The I-could-not-afford-a-long-sarape-so-I-just-took-my-baby-sister´s Mexican.
The my-pants-are-falling Mexican!

The 2x1 special in Mexicans!

The North-American unwanted immigration!
The mexican with the pistolas, man!


The I-don´t-even-know-I-am-being-a-racist-bigot Mexican!

para más fotos del evento, aquí: freakfest.