A pesar de la
gran máquina de propaganda que es el cine y la televisión de gringolandia, hay
diferencias culturales que son sutiles y uno no cacha o entiende que son
precisamente diferencias culturales y no otra cosa.
Una de ellas es
el saludo.
Cuando uno se encuentra a un gringo blanco en estado salvaje y
desconocido, léase, se topa con un colega (que no es una amistad) en el
pasillo, si sucede que hay saludo
(porque en la mayoría de los casos caminan sin ver a los ojos y pretenden que
uno no está ahí para evitarse completamente esto), entonces, si sucede que hay
saludo, aprietan los labios, miran brevemente a los ojos y luego miran hacia
otra parte.
Algo así:
Aprietan los labios |
Te miran brevemente |
Miran para otro lado |
Anyway, obviamente no soy la única persona (insisto, la edigator es una persona humana a pesar que esté clasificada aquí como legal alien) que nota esto.
.
Hasta hicieron un vine muy representativo de esta situación.
Fuente original
Lo que quería decir es que ¡ya encontré el origen de esta sonrisa tan particular!
Observen:
Los labios, la mirada hacia un lado, la cara de desagrado, ¡igualitos! |
Este señor en el billete de 100 dólares es uno de los dioses más
reverenciados de esta nación, lo consideran el inventor de la estufa, la
electricidad, las bibliotecas, el correo, los lentes, los papalotes gigantes, la
declaración de independencia, la demografía, las corrientes del océano, los
refrigeradores, el ajedrez, todo lo que salía de este señor es pura e indudable
genialidad. Además, como el resto de los padres fundadores, aunque tenía
esclavos y los vendía y los torturaba y ganó dinero con el tráfico humano, “los
trataba bien”. En fin, era un Leonardo
da Vinci quítate que ahí te voy... o al menos así lo creen acá.
Aunque, bueno, no sé de qué tanto les vaya a servir esta información porque seguro pronto dejarán de emitir visas y empezará la deportación masiva de todxs los no albinxs.