El otro día tuve
una conversación muy simpática.
La fecha era 12/12/12 (doce de diciembre del dos mil doce), y esta persona, llamémosla Shirley, decía
que era una fecha cósmica porque se alineaban los planetas y el plano astral
del espíritu y no sé qué más.
Le dije que era absurdo, que el calendario gregoriano que usamos lo
creó un Papa en 1582 y no tiene nada de mágico el día.
Y entonces me
dice algo que es incluso más absurdo, me dice (wait for it) que no es cierto. Que el año es 2012 porque (wait for it), el mundo tiene solo 2012 años de antigüedad.
...y, ¡Shirley es adulta!
Me quedé
patidifusa, y le pregunto (yo asumiendo que Shirley posiblemente conocía la mitología cristiana), ¿Entonces qué edad tenía la virgen
María antes de tener a Jesús?
Y me ve, abre la
boca y me grita antes de irse, ¡pues es mi opinión y me quedo con ella!
Y entonces me di
cuenta de una cosa de nuestro mundo contemporáneo, es tal la fuerza y poder que
tiene la frase que todas las opiniones son igualmente válidas que,
independientemente de la verdad o de los hechos reales, la gente cree que todas
las opiniones son igualmente válidas.
Los dinosaurios
no existieron.
Cómo que no, ahí
están los huesos.
Pues ésa es mi
opinión.
Los pobres son
pobres porque son flojos.
¿Qué? ¿La razón por la cual el 80% de
la población mundial vive en pobreza es porque es floja?
Pues ésa es mi
opinión.
O en su versión
defequense, “Mira, está lloviendo, ¿estás de acuerdo?”
No, mundo del
siglo XXI, no.
No todas las opiniones son válidas, ni todas las opiniones
deberían ser escuchadas. Pareciera que la gente perdió la capacidad para
distinguir la verdad o darle incluso importancia a la verdad. La verdad ya no
importa, lo único que importa es la opinión. Supongo que por eso están desapareciendo las humanidades, Fox News tiene tanta potencia, y hay tanto abuso de autoridad.
Es como si hubiera una alineación cósmica interplanetaria que nos acerca a la constelación de Sagitario que está posicionando a la Tierra en el centro de la Vía Láctea y por eso está bloqueando los chacras, en especial el sexto, que dirige la percepción y no nos permite visualizar el mundo porque ha caído una nube de confusión frente a nuestros ojos.
Como leí por algún lado: "el discurso de la tolerancia se lo apropiaron los estúpidos para poder decir cualquier cosa".
ResponderBorrar@Caracola -Yo creo que sí son estúpidos, porque si fueran sólo ignorantes con un libro se quita. Pero el estúpido se jacta de su ignorancia.
ResponderBorrarCuidado con los estúpidos que se jactan, porque se creen listos...y no lo son
ResponderBorrarEs mi opinion y basta