23.4.08

Licht, mehr Licht!

Como ustedes saben, el cuerpo está formado por esta luz blanca envuelta en una suave capa de piel. Cuando ésta se rasga y la emisión luminosa entra en contacto con el aire, los electrones dejan de moverse y se asientan en una viscosidad púrpura la cual se precipita a la tierra.
La inhabilidad de tocar polvo, arena, roca, planta hace que uno quede suspendido en el limbo de la realidad y pierda contacto con lo existente, y vienen problemas.

En cambio, si uno logra controlar mental o psíquicamente el movimiento de sus electrones, se puede descartar el cuerpo y precindir de las absurdas teorías físicas que nos atan a la tierra.
Los científicos de hoy, siglo XXI, acaban de darse cuenta que quizás la teoría de la gravedad no era del todo cierta (prueba de
a) que la física es más parecida a una religión que a una certeza y
b) la gente medio aprende algo con el paso del tiempo… aprenden que antes sabían más).
Entonces, decimos que adquirieron entendimiento, o en otras palabras… ¡luz!

Goethe se agoniza, ¿cuáles son sus últimas palabras? “¡luz, quiero más luz!” Claro que pedía que le descorrieran las cortinas (no aprender más, ¡por Chaac!), para contagiarse de esa luminiscencia y rellenar el cuerpo, osea, pedía una pequeña prórroga. Theodore Roosevelt, un gringo tarado, al contrario mientras moría exclamaba, “Apaguen la luz". Aunque cabe decir pobrecito, pues tenía una esposa quien por cuyo apelativo y lo que conocemos sobre las homónimas, bien podría ser que estuviese huyendo de ella (con extrema y justa razón).

El caso es que todo mundo sabe esto, no sé por qué se espantan. Cuando viene un ataque de migraña o nos golpean la cabeza, la luminosidad interna se lanza contra nuestros ojos y vemos pedacitos de lucecitas bailando, como luciérnagas.

Cuando los budas descartan su cuerpo se dice que se iluminan.

Cuando los santos se vuelven santos, se les salen los rayos por la cabeza.

Hay gente con sensibilidad extrema que puede ver la brillosidad humana escurriendo por los poros de la piel (está un poco perforada).

Hace 2 mil años las chicas sabían esto, veían venir a la luz y tenían que correr o quedaban embarazadas.

Cuando el muerto descarta la piel, queda el concentrado de luz en forma de una estructura calcificada.

Si uno descarta el cuerpo y no aprende a controlar su luminosidad, pues bomba atómica.

Así que, gracias al aikido y una clase donde nos enseñaron a volar (bueno, intentaron enseñarme a volar, yo aprendí a caer con el cuello) pude irme a tomar unas fotografías de mi luz interna. Salió muy bien. So i share.

9 comentarios:

  1. Pobrecita, me cae que te gusta el sufrimiento.

    Respecto a esto:
    "..acaban de darse cuenta que quizás la teoría de la gravedad no era del todo cierta (prueba de
    a) que la física es más parecida a una religión que a una certeza..."

    Realmente es prueba que el método científico funciona y que el conocimiento va avanzando. Eso es lo bonito de la ciencia, que constantemente busca posibles errores y como corregirlos. Esto no pasa en la religión.

    :)

    Además, lee el artículo completo, jajajaja
    :P

    ResponderBorrar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderBorrar
  3. de todos modos, siento que he caído en una trampa (gracias, Estela), y que no entendí que el punto era hacerse pasar por newagera.

    JAAJJAjaJAJAJAJAjaAJAJA
    grrrrRRRrrrr.

    así que a la chi, olvida mi comentario anterior. qué azotada soy.

    ResponderBorrar
  4. chin, no lo alcancé a leer.
    pero sabía que alguien de las dos que ya contestaron tenía que decir algo sobre lo de la física y la religión :P

    pero yo quiero ver mi luminosidad!
    creo que he sabido controlar bien mis electrones.

    ResponderBorrar
  5. Anónimo7:30 a.m.

    José Supermán deixou um novo comentário sobre a sua postagem "Licht, mehr Licht!":

    ah, yo también brinqué cuando leí la analogía física-religión. si bien es cierto que luego nos (me) tomamos esas cosas como un reemplazo espiritual (o sea, cómo no idolatrar al Bosón de Higgs o al Big Bang), la Ciencia en sí no es inamovible como los preceptos religiosos.

    O sea, Newton no está equivocado. Simplemente se dio cuenta del fenómeno, dio una explicación cuantitativa y cualitativa -la mejor en su momento y hasta que llegó Einstein- y de paso inventó el Cálculo. Einstein mejoró la primera aproximación al fenómeno gravitatorio. Los físicos de ahora buscan mejorar esa aproximación, buscando maneras de dar con una Teoría del Todo (ah, se oye tan metafísico). El mismo Einstein trabajó en el problema. Pero... no, la teoría gravitacional es cierta. Al menos macroscópicamente la simple teoría newtoniana es muy válida (digamos que para mandar al hombre a la Luna no se necesita usar la teoría de la relatividad general; la corrección es muy pequeña). Conforme vamos cambiando de escala (por ejemplo, de un viaje interplanetario a uno intergaláctico), la importancia de la teoría de la relatividad crece, crece, crece, sobre todo cuando la masa crece, crece,crece. Igual pasa con el tan manoseado concepto del principio de incertidumbre -macroscópicamente no tiene ningún sentido, puesto que para nuestra escala, el cuerpo siempre tiene definido un momento y una posición espacial. Para fines prácticos, tu cuello casi se hace polvo por culpa de Newton, no de Einstein. :P

    La realidad es que para la Ciencia no hay nada terminado, ni certezas eternas. Sólo por eso existe mi tesis, snif, un segundo barniz a un primer trabajo doctoral. Así que la b) tampoco aplica, ¡se sabe ahora más que antes (aunque en el proceso se tienda a mentar madres)! (oh, orgasmos de placer científico.)

    si la teoría de la gravedad no fuera válida, ya me hubiera enterado -la pinche tesis no serviría, GrrrRRrrR, adiós equilibrio hidrostático, adiós a las nubes y a la atmósfera! bueno, ya me extendí, yo sólo quería decir que no, que Newton es chido y Einsten más, y que chale, pobre cuello.



    -jajajaja, la iguaniux de la basura

    I know. La ciencia es falible y por eso es la neta del planeta. Pero en el macrocosmos y al final de cuentas, nada importa. Son como las reglas del juego que nadie se sabe y cuando empiezan a entenderlas, resulta que ESTABAN MAL (aunque funcionen). jajajaja

    ResponderBorrar
  6. ay, yo lo había borrado porque me azotéeeeee! y luego me da pena.

    JAJAJAJAAJAJAJJA

    :'(

    bueno, ahora ya sé que no puedo arrepentirme si llego a insultar a algún ente desconocido. gr.

    ------
    pero... lo malo es que cuando las reglas del juego cambian, ya ni estamos aquí para saberlo. y dentro de mi lapso de tiempo sí importa porque... pos porque me pagan.

    ResponderBorrar
  7. ayy por qué te dan pena tus azotes científicos!!
    si es tu momento para el spotlight. jajajajaja

    :P


    (pero por ejemplo yo mejor no digo nada así porque si no me madreas y a mi también me da pena. JAJAJAJA)

    ResponderBorrar
  8. Anónimo8:37 a.m.

    Pues a mí sí me gustaron tus azotes. Luego la gente por pena no ilustra y ahí andamos los pendejos rebuznando.

    -la iguana de mar

    ResponderBorrar
  9. Me cae que sería divertidísimo un team teaching de TOK con Lucha y la Edith.

    :D

    ResponderBorrar