Y pues me dio hambre me da hambre a veces y eso fue el principio de todo, porque empieza la conservación de energía… poco a poco las cuestiones no vitales del cuerpo se van apagando: el sentido del humor, la tolerancia, la retención de información, la inteligencia…
una persona hambrienta es: gruñona, racista y pendeja.
Entonces le hablo por msn a la madre:
Yo: madre, tengo hambre
Madre: pues prepara algo y suficiente porque yo quiero comer
Yo: mejor pido algo
Madre: ntc (¿ntc?), hay pollito, sopita, frijolitos y tortillitas, los calientas en el sartencito porque no sirve el micrito.
Yo: y eso cómo funciona?
Madre: Mira, and i quote, es algo muy antiguo pero efectivo, googléalo.
Flash forward (etapa semi pendeja)
La edigator intenta encender la estufa:
Abre la perilla, prende un cerillo y se quema la mano. Grita. Toma un periódico, lo enrolla, acerca el fuego a la punta con el cerillo, trata de sofocar el cerillo y se incendia el pelo (un poco) y el periódico comienza con una flama alta, chispea y toda toda la plana echa llamaradas a la vez, la edigator brama y lo arroja a la estufa, la perilla lleva un rato soltando gas, fooosh, la fogonazo en la campana y la orilla de una cortina. La edigator toma un trapo e intenta apagar todo, el trapo se abrasa. Pero se extinguió el periódico, todo normal, tralalá. Toma trapo y lo moja (lanzado al lavabo, abrir llave).
Situación controlada.
Pone pollito en sartencito, sartencito en la lumbre.
Empieza a preparar café, toma tacita de starbucks.
Pone sopita en ollita, pone ollita en estufa.
Flash forward (etapa full pendeja)
La edigator subiendo el blog de la nieve, el humo repta por las escaleras, ella estornuda un poco y lo percibe. Omaigod. Aparato-estufa no se apaga solo. No no no. ¡Hay que cuidarlo! Pollito calcinado, very, algo negro, bastante crunchy. No hay problema. Pátina en las paredes, no se ve bien el plato por la densa humareda, no pasa nada, prueba el pollito, pollito rico, y en eso, ¡zaz!
Cruje la puerta, se abre la puerta, atraviesa la puerta… ¡El novio de la madre!
Ël profiere alaridos con palabras como fuego, bomberos, humo, qué pasa aquí.
Edigator se ahoga con pollito y trata de dar explicaciones, ninguna es suficiente, abre puertas, ventanas, prende abanicos, agarra una toalla y echa aire, fu fu fu, sopla.
Se disipa todo, en el lavabo, un periódico incendiado y un ex trapo de cocina.
El novio de la madre se lleva las manos a la cabeza y aúlla porquéporqué.
salí huyendo.
ahora, por supuesto, tengo que pensar en un regalo de fiestas decembrinas lo suficientemente bueno para que me vuelvan a admitir en esa casa.
y no comí.
Edigator, eres mi ídola de juventud. En Madison nos cayeron los bomberos porque yo puse a tostar pan, bajé por el correo y olvidé las llaves.
ResponderBorrarNo me pusieron la multa de 300 dólares por movilizar a todos los gringos de mi edificio, plus al cuerpo de bomberos, porque me vieron la cara de pendeja auténtica y les di lástima.
Es bueno no saberse tan sola.